Within Temptation - An Acoustic Night at the Theatre

Within Temptation es una de mis bandas favoritas, un grupo que me provocó amor y devoción desde la primera vez que lo escuché. A pesar de su penoso presente, fueron una de las agrupaciones más grandes de metal sinfónico que surgieron a fines de los noventa y durante años compartieron el podio de los ganadores junto a Nightwish y Therion, por el simple hecho de la enorme calidad compositiva de álbumes maravillosos como “Mother Earth”, “The Silence Force” y “The Heart of Everything”.

Este acústico, su desenchufado particular, es poco conocido, pero lo que me cautiva del mismo es que aquí se encuentran casi todas las canciones de su mejor época. A pesar del sonido sencillo y minimalista, a base de piano, guitarras acústicas y un cuarteto de orquesta, las versiones son hermosas, Sharon den Adel suena tan magnifica y conmovedora como en las versiones de estudio. Por un lado, está el single “Stand My Ground”, bien lograda sin toda la orquestación original, y ya se escuchan las ovaciones del afortunado público; la celta y folkie “Caged” de su laureado “Mother Earth” y la maravillosa “What Have You Done?”, cantada a dúo con Keith Caputo de Life of Agony.

Era lógico que Within Temptation eligieran baladas en su mayoría, porque son las que mejor se ajustan a este formato, el tema es que las “baladas” de los holandeses no son comunes y corrientes, son unos baladones tremendos… Imagínense tener a “Frozen”, “All I Need” y “Memories” en un solo disco, que es lo que sucede aquí.

Por una parte, está “All I Need”, con su letra súper romanticona y desgarradora, es de esas canciones que te arrancan lágrimas, sumados al cello y a la interpretación magistral de Sharon, es uno de los mejores temas de metal sinfónico que escuché en mi vida. ¡Qué voz hermosa la de la holandesa! Dulce, suave, versátil, conmovedora… Esta mujer es como un ángel sobre la tierra, siempre lo afirmé desde la primera vez que la escuché cantar.

“Forgiven” es otra de las joyas que tocaron, donde aparece ese piano desolador y esa melodía devastadora y triste, pero que te llega al corazón. A veces uno encuentra belleza en la tristeza, en el dolor y esta vocalista tiene una cualidad que muy pocas de sus colegas poseen, sin tener una gran técnica, es muy expresiva en sus interpretaciones, sabe mostrarte todas las emociones que requieren las canciones y por eso es tan especial.

Lo increíble es que tanto “Frozen” como “Memories” no pierden la fuerza de las originales, sino que estas versiones están muy bien logradas y eso lo consiguen pocas bandas. Esa esencia gótica que tenían en sus inicios se hace presente en “The Cross” y “Pale”, tristona y lúgubre a más no poder, con un par de instrumentos estos holandeses hacían magia y por eso recalco la grandeza de esta banda, que fue una de los mejores exponentes de su género. Nunca encontraré las palabras suficientes para hacerle justicia a este álbum.

Creo que el momento más emotivo de este directo es el dueto con la legendaria Anneke Van Giersbergen en “Somewhere”, una balada que te llega al metal heart y las voces de ambas cantantes quedan espectaculares, por el timbre de soprano suave de Sharon y el más grave de su compañera. Muy amable de parte de Anneke participar en este acústico. La letra es una absoluta belleza y por componer canciones como esta, Within Temptation fueron tan grandes como grupo de symphonic metal.

Los holandeses suenan increíbles en este desenchufado y demuestran que una banda de su calibre y talento puede lograr sonar espectacular sin tantos coros, teclados y orquestaciones. Este estilo minimalista captura a la perfección la esencia de la banda y me encantaría que regresaran a sus raíces otra vez.

“An Acoustic Night at the Theatre” es un disco precioso que recomiendo escuchar en un día tranquilo y apacible, porque las canciones son acústicas y baladas en su mayoría. Pocas bandas logran lo que consiguieron Within Temptation, conmover al oyente y dejarlo alucinado con su talento y capacidad de componer canciones hermosas, repletas de pasión y sentimiento. No me importa su presente en el que decidieron experimentar con sonidos más comerciales, porque siempre llevaré la música de mi admirada Sharon den Adel y compañía en el corazón, porque con su arte me brindaron alegría, emoción y placer infinitos.

Puntuación: 9/10