Danger Zone - Victim of Time

Enviado por stalker213 el Dom, 25/07/2021 - 21:26
4811

Así es, señoritos. Apenas si hace tres semanas que volvía a descender a la llanura a lomos de Pegasín trayendo (los dos) jugosos volúmenes de copioso METAL para compartir con la parroquia, pero hoy en la cuarta entrega de este nuevo ciclo dominical (¡Es un serial! ¡Es una saga!), vamos a empezar a sacar los jodidos tanques rellenos de crema a las calles de la ciudad, desenterrando una de esas bandejas de pechuga putrefacta mejor enterradas en el jardín. Esto es bello. Y es que no sé si alguna vez alguno de ustedes, zarigüeyas infaustas de corral, han tenido el placer de exhumar una sucosa bandejita de pollo largamente pasado de fecha allá en sus jardines, pero ésa ¡Ah! Es una experiencia que ha ser vivida para comprenderla en su total y severa dimensión. Allá que nos vamos… ¡Hahay!

Bologna año 1983. Los ochentas empiezan a someter al Reino con férreo puñete de hierro. Los setentas se han ido hace rato y las huestes del Señorito Esteban ya están cómodamente aferradas en los mejores condados, así como él en su trono. Otros poderosos señores feudales como el Pequeño Gran Hombre y el Hijo Proscrito de la Aristocracia Más Loca, ya venida a menos, se disputan el favor de Metallian Master of All Metal, mientras Platini empieza a perforar las mallas de todos los estadios de la Gran Bota, pero indudablemente esta es una época en la que todo el mundo quiere sonar como tus MAIDEN ¿No es cierto, rico? Como si fuera así de fácil ¿Verdad, jilguerazos?

Para más inri, sucede que coetáneamente existen simultáneamente otras dos bandas que se llaman igual y ni son aborígenes australianos cantando flamenco, ni tampoco esquimales con la tocha empolvada haciendo techno, sino que los tienen a no demasiados kilómetros: Unos en Francia tocando un Heavyacho bastante competente y a los otros en Dinamarca con un tal Kim Bendix Petersen al frente; Y efectivamente: Me sabe mal pisotear tus ilusiones de mierda, pero aquí y ahora se rompe dolorosamente un mito y es que los catacracks no nacen, sino que se hacen. Ni a BLACK SABBATH, JUDAS, MAIDEN o MERCYFUL FATE nadie los tocó con una varita mágica regalándoles el ser tan buenos, no. Es trabajo, trabajo y más trabajo, añadido ¿Qué duda cabe? A un talento que en cualquiera de los casos debe ser mortalmente excepcional, pero si detrás no hay un trabajo exacerbado y destructivo, ahí te vas a quedar plantado con tu “talento”.

Y DANGER ZONE no son una excepción, hostias. Y es que para cuando los Boloñeses están grabando esta joya (trufada de caviar salvaje) en el estudio, apenas si llevan unos meses llamándose así y tres años tocando juntos, pero como resulta más que obvio incluso para el más trasnochado de los obtusos ¿O no? En cuanto los gusanitos empiezan a descender locos en slalom después de la segunda vez que atruena el estribillo, aquí ya es palmaria la calidad y la legitimidad salvaje del pedigrí de estos hijos de una puta. ¿Calva? Pues no lo sé, pero puta, lo que se dice puta, su madre lo fue un rato, porque para invocar esta magia, esta genuinidad y semejante fuego en el alma de cualquier metalhead que se precie de serlo, hay que estar tocado por los Dioses. Eso sí, la gran putadísima es que los Dioses son caprichosos, y lo mismo que te conceden su favor, te lo quitan y esto, amigos, probablemente es lo que le ha pasado al, no sé, ¿99%? de bandas buenas de Heavy Metal que han existido. No obstante, el tema título da una idea inequívoca de por dónde van a ir los tiros; Y POR ENÉSIMA VEZ: El amateurismo atufa que tumba de espaldas. La producción es tirando a modesta, cuando no pobre. Pero la conclusión es invariable: HOY VOLAMOS DURÍSIMO.

Y sí, las tuberías de Merlini no juegan en Champions, pero ¡Robusta cloaca rebozada de guacamayo apopléjico! Hacen el puto click que me hace hervir los santos cojones. Esa voz no es que la compro, sino que me la llevo conmigo a la tumba si es que algún día al bueno de Pegasín se le termina el fuel en pleno vuelo y me precipito a tomar por culo desde acullá en las estrellas. El tipo juega con sus aguditos y tal, además de hacer gala de una dicción del inglés digna del mejor taxista de una peli de Mario Monicelli, pero el empuje, la ilusión y la mejor de las intenciones, las más de las veces, pesan más en nuestro reino antes que no el canto estiloso de un gilipolla integral salido del conservatorio. Ahora bien, las guitarritas cremosonas de Priori (que al punto es también el ingeniero de sonido) y Di Nicola son las que hacen de este estratosférico panetone de apenas 20 minutos, uno que apuesto un guisante que si de verdad sientes esta buena mierda, jamás vas a olvidar.

“Doctor Freak” no se desvía tampoco del sendero que conduce a la gloria. Y sí, el título lo mismo invita a pensar en una de las célebres imbecilidades que hicieron de HELLOWEEN una pandilla tan entrañable, pero es que sucede que es 1983 y que el pillo Kai está todavía zampándose una malagüeña deluxe en el bareto de su tío Wolfgang. ¡Sí, coño! Ese que aún untando su buena mostarda en sus poderosos frankfurts ¡Y delante de sus clientes! Jamás cesa en el empezó de encontrar petróleo allá en lo más hondo de su narigudo ser, pero no nos desviemos, joder, porque “Doctor Freak” avanzaba firme por sus sabrosos carriles y la siguiente “Wolfox” es todavía mejor. Ambas extraodinarias, pero atiende al cambiazo de ritmazo que alza en vuelo en la segunda tras el calmo pasaje en el cual Merlini nos relata como una taimada chiquilla al fin da caza al lobichuelo para al punto entregarlo a los cazadores. Joder ¿Es o no esto TU METAL? Ese ramalazo de Speed furibundo no se lo salta el primo gitano de Bob Beamon ¿Comprendeh la filosofía? Y el solaco que explota tras la última estrofa, una santa cagada de búfalo macho bajando lenta por tu puta cara ¿Ah? No te lo esperabas, pero esta movida es la crême. Lo sé, pollo asado de Batu.

“I’m Wating for You”, en cambio, arranca más festiva. Muy melódica, moderna (en el mejor sentido de la palabra) y rebosante de brío, pero exactamente igual de impactante. Como ya he dicho antes: Todo es de por aquí del barrio y tal, pero es tan auténtico, tan artesano y está tan BIEN HECHO, que no puedes más que postrarte de rodillas. Esas guitarritas no son de un imbécil que busca un like. Aquí nadie quiere pulgares arriba en señal de aprobación, ni más visitas que mi vecino del quinto, no. Aquí hay ilusión. Hay compromiso y la voluntad de pasar un buen rato. Se está haciendo Historia sin saberlo. Y que a nadie se le pase por alto: Con un acopio de talento y una calidad impensables echando así un ojo rápido a la ecuación que os traía esta tarde. ¿Heavy Metal Italiano? ¿Y con esa portada cutrona? Anda marcha, carroza pringao y déjame con mis ídolos de plástico que me dan esa música tan buena pagando 5 perejiles en iTunes. (Ruido de heces liqüificadas…).

Nos vamos again junto a “Dragon’s Lair”. ¡Y qué nunca cese la épica, pepillo! Pero vamos a ver, hostias reconsagradas en vinagre, ¿En serio que alguien no ve que esto es élite camuflada de campesino con una ramita en la boca? De tus MAIDEN más rampantes chafando al universo con su World Piece Tour ya te esperas lo que sea, porque sabes que son los amos rascándose el bálano arriba en lo alto de la cresta de la ola, pero esta catarata de divino Heavy Metal viniendo de cinco pelacañas de Bolonia que lo mismo hasta les apesta a mortadela el cuello de la camisa y que les saca su mierda de disco ¡Subrecord! ¡Atiende multinacional, papá! ¿En serio te parece normal este nivel y esta rotura de termómetro de calidad? No, hombre. Si tú has estado atento a tus clases de METAL y has trabajado bibliografía en casa, esto sabes que no es para nada normal.

“Land of the Ancient Bones” pone el broche final y mi veredicto es claro: No le van cinco cuernos, porque tampoco es cosa de perder el mundo de vista, pero atendiendo a las variables de la ecuación, este MLP es una jodida rotura del quince que se cruje por todos los lados habidos y por haber. Es obvio que no se compara a lo mejor de su época y al punto, intentar hacerlo constituye en sí el acto de estupidez más intrépido, pero si sabes de qué va la movida, tú entiendes sin más como “Victim of Time” es un must si lo que pretendes es capturar la esencia más noble y sincera de este bendito tesoro que es el Javier Metal.

NO LO DUDES
NUNCA
VUELA, AMIGO, VUELA ALTO
VUELA FUERTE, VUELA DURO
SIEMPRE ARRIBA
CON TU METAL
PERO ANTES LIMPIATE LA MOSTARDA DE LA REMERA, CHE!

87/100

Massimiliano Merlini: Voz
Roberto Priori: Guitarra
Frencesco Di Nicoli: Guitarra
Stefano Gregori: Bajo
Vito Camporeale: Percusiones

Sello
Subrecord