
1-Stampede
2-Stalingrad
3-Hellfire
4-200 Years
5-Losers and Winners
6-London Leatherboys
7-Starlight
8-Dying Breed
9-Final Journey
10-Shadow Soldiers
11-From the Ashes We Rise
12-Restless and Wild
13-Ahead of the Pack
14-No Shelter
15-Princess of the Dawn
16-Dark Side of My Heart
17-Pandemic
18-Fast as a Shark
Bises
1-Metal Heart
2-Teutonic Terror
3-Balls to the Wall
18 añitos tienen, igual que yo, todos aquellos que se hallan a mi alrededor, y ya se oye por algún lado la expresión “Mi época”. ¿Pero será posible? Ya es ridículo oírlo de mi padre, imaginadlo de un chaval hablando de su segundo de ESO. Cuando uno dice “Mi época” ¿Significa que lo mejor de su vida ya ha sucedido? ¿Qué ha asumido que el futuro será necesariamente peor? La única verdad que veo en esto, es que a veces necesitamos disfrutar de las cosas con nostalgia para poder gozarlas de verdad. Muchos debieron ir a los conciertos de Maiden de los 80’s sin ser conscientes de la grandeza de lo que veían. Años después se dieron cuenta de que asistieron a una gira excepcional. ¿Cómo puedo sentir nostalgia de una época que yo no he vivido? Nací en el 96, incluso “Death” estaba ya regalando sus últimas joyas, pero eso no me desacredita para hablar sobre ningún tipo de música. Pues Accept son de mi época, igual que Maiden, Anthrax o Megadeth, a los que he podido ver en directo.
Guillem y yo tuvimos que esperar para ver a unos de nuestros héroes, pues Damnation Day actuaba antes que ellos… El integrante del grupo que valía (Hágase notar el uso del singular) nos hizo pasar un muy buen rato, para justo después, irse sin dejar la menor huella de su recuerdo en mi memoria, y seguramente en la de ninguno de los asistentes. Entre concierto y concierto se oían los comentarios de aquellos que vieron el nacimiento de estos teutones, y tal como los oía recordar he de volver a insistir en la nostalgia como necesidad. Ese sentimiento doloroso que procede de una idealización del pasado nos lleva a la forma máxima de éxtasis… El emocionarse, las lágrimas agridulces de observar un momento de gran belleza, que es amargo simplemente por el hecho de no ser infinito.
Esa emoción de la que acabo de hablar, desde luego dependía en este caso de la actuación que hiciesen los alemanes sobre el escenario, e igual que me pasó el año pasado con Maiden, el éxtasis emotivo nacía de el contraste, de la antítesis entre el tremendo vigor y rabia que Accept jamás perdieron, y los claros síntomas en los integrantes de que el tiempo también pasa para ellos… Las mollejas cayendo de los brazos cuando se coge el bajo, las ingentes canas y el no tan ingente pelo, en total contraste con esa potencia alemana… ¿Cuando morirá nuestro género? Ellos responden con cada uno de sus gestos sobre el escenario: HOY NO.
El debate Tornillo contra Udo yo lo terminaré rápido, aunque ojalá de su jugo en los comentarios. No voy a decir lo de “Actualmente no hay color”, pues no lo creo. Aprecio el trabajo de Udo como uno de los más grandes que se han hecho en el metal, incluso en solitario ha seguido siendo grande. Sin lugar a duda es él el que pasará a la historia, mientras que el otro nombre caerá en el olvido… Sin embargo mi respuesta es radical, no solo me gusta más como suena con Tornillo comparando con el Udo de ahora, sino que me gusta más incluso comparándolo con el de antes. Versiones Clásicas como especialmente “Losers and winners” o otras como “London leatherboys”, o una enorme “Restless and Wild” me gustan incluso más en directo por este hombre que las tremebundas originales ochenteras. No le doy ese placer a Tornillo con “Fast as a shark”, que es una de las mejores que se han marcado los alemanes y que es puramente para el cantante original y que fue lo que mejor sonó, rivalizando con una “Princess of the dawn” que provoca los lagrimones de los más estoicos. ¿Todas las opiniones son respetables? No estoy nada seguro, e incluso me decanto por el no, pero todo humano está no solo en su derecho, sino en la obligación y deber de darla.
Este no es el caso de Anthrax, que en el estudio han bajado el nivel notablemente, pero que al subirse al escenario ahora mismo son una de las cinco mejores cosas que se pueden ver en nuestro mundo. Es que cuando los alemanes han tocado un estudio incluso en esta última y maldita década han hecho maravillas… No hay más que ver los directos que se cascaron de canciones como “Teutonic terror” o lo que va en camino de ser un himno incluso observando toda la discografía de estos mozos “Stalingrad”. Sin duda adelanto ya ahora que mi nota va a ser la máxima. De todos modos la actuación acepta (Esa última palabra no era un intento de chiste), la presencia de los discos clásicos como el hilo conductor de la actuación, se puede ver en el set list, y especialmente en ese final con “Balls to the wall”. Hay que ver lo patéticos que fueron siempre los bailes de estos chicos mientras interpretan, sus coreografías rozan lo cómico y atraviesan directamente lo repulsivo, y aún así se hace emotivo verlos moviéndose al unísono una vez más.
Directamente se les ha de agradecer lo que me dieron en aquel día, otra vez junto a mi amigo con el que ya he visto a otros tantos grandes. Poco entro en que hubo un Hoffman que se salió y un Frank que pasó por el escenario como una alma en pena haciéndose valer de su don para la invisibilidad, o del morbo que supone ver a Schwarzemann en directo. Si que he de comentar algo antes de mi conclusión, y es que se les pone muchas veces sentados en la misma mesa que Maiden, Judas, Scorps… Y aunque desde luego que se lo merecen, no tienen nada que hacer frente a ninguno de esos tres en cuanto a calidad se refiere. Ahora bien, que nadie intente tener más fuerza ni cojones que estos alemanes.
Cuando me pregunten mis nietos. ¿Cuál era la música que escuchabas en tu época? Tengo ya clara la respuesta: En mi época no paraba de escuchar a Iron Maiden, Anthrax , Megadeth… a los que vi en directo (Prontito se espera el Rockfest para repetir Accept, más Helloween, Judas W.A.S.P… Se le cae a uno la baba). También escuchaba Thin Lizzy, Death, Camel,Fates Warning… Cosas que sonaban en mi época… Y que empezarán a sonar en la tuya, si aceptas a pinchar este disco que ahora te traeré. Puedo jurarte que si reaccionas como lo hice yo, este es para ti el principio de muchas cosas.
Mark Tornillo: Voz
Herman Frank: Guitarra
Wolf Hoffmann: Guitarra
Peter Baltes: Bajo
Stefan Schwarzmann: Batería