Venom - Possessed

Enviado por Hawkmoon el Sáb, 18/12/2010 - 19:39
10

1. Powerdrive
2. Flytrap
3. Satanachist
4. Burn this place (to the ground)
5. Harmony dies
6. Possessed
7. Hellchild
8. Moonshine
9. Wing and a prayer
10. Suffer not the children
11. Voyeur
12. Mystique
13. Too Loud (for the crowd)

Venom siempre han sido un espectáculo. Desde su primer y seminal "Welcome to Hell" (que abrió las puertas a un nuevo mundo), pasando por su definitorio "Black Metal" (que demostró que Metal y técnica no siempre debían caminar juntos) y su conceptualoide "At War With Satan" (dignísima tercera entrega que supo jugar muy bien sus cartas), la banda británica se esmeró en ganar su posición en la escena metalera, a base de mucha reminiscencia a Motörhead, mucha aura satánica de cartón piedra y mucha ira, tan desmesurada como apocalíptica y festiva. Venom eran el mal, si, pero un mal la mar de ameno, divertido y poco serio. Tomarse en serio el mensaje de Venom es imposible, pero es un viaje bestialmente chistoso. Venom son como una mala pelicula italiana de terror, ok, pero dirigida con mano de hierro y con muchos huevos.

El éxito de la banda era palpable en 1985, y sus shows en vivo, a una escala mucho menor que Maiden o Priest, obviamente, eran de lo más. Fuego, sangre falsa, mucho decorado a lo Spinal Tap, chispazos...en fin, algo así como unos Kiss mordidos por un perro rabioso y semi-zombie. El Metal, y más en esos momentos, se diga lo que se diga, estaba fuertemente anclado en una imagen, en una estética, y la banda de Mantas, Abaddon y Cronos, muy listos ellos, se supieron subir a un carro en marcha, para hacerlo volcar, coger las riendas y conducirlo directamente al infierno. Un infierno garajero y punk-rockero, revestido con puertas metálicas y poca calidad musical, eso si, suplida con una incontestable hambre de gloria.

Tres discos los pusieron en una especie de cúspide extrema, y el cuarto paso debia de darse con cautela. Superar un tercer disco de calidad siempre es dificil, aunque Cronos y sus muchachos, quizás, abotargados por las drogas y los excesos de su puesto de reyes, no temblaron ni un ápice, y se pusieron de nuevo el traje de batalla para seguir guerreando en el nombre de Satanás.

"Possessed" era la cuarta ofrenda de los dioses del Black Metal (Thrash garajero, realmente) a sus hordas melenudas, y como tal, la portada debía seguir siendo marca de la casa, para horror y escándalo de padres y demás politicuchos de baja estopa, que culpaban al Metal de sus malas gestiones. La fotografía, en negativo, de dos niños (un niño y una niña), con sus camisetitas de Venom, mirando a cámara, era lo suficientemente intranquilizadora para servir como estampa. No hace falta la portada de una monja, medio desnuda, masturbándose con un crucifijo, para quitarle el sueño a los adultos bienpensantes. Sin duda, una imagen oscura y peligrosa. Nada del otro jueves, ya, pero tiene su cosa la estampación. Hipnótica, quizás sería, la palabra que mejor la define. Veamos que nos deparan los más locos de los metaleros oscuretes...

Una bateria desmelenada abre la veda con "Powerdrive", un tema con unas cadencias muy de la era "Black Metal", pero sin demasiada chicha ni limoná, es decir, la velocidad y el deje natural de la banda se intuye en cada segundo del tema, pero parecen como aburridos, y lo que es peor, nos aburren. La voz de Cronos se erige como protagonista total y opaca totalmente la labor de Mantas (que sigue soleando con su bizarrismo habitual y su limitada técnica) y Abaddon. Nada que no suene manido en el reino musical de los británicos.

"Flytrap" sigue por los mismos derroteros del tema anterior, mientras que "Satanachist", se dispara a toda hostia, volando por terrenos Punk y con unos coros, que medio te hacen reir, medio te impulsan a seguir pegado al tema. El bajo de Cronos lleva el mando y los demás van acotando lo que pueden (o lo que les dejan). Temas con una misma sonoridad, pauta y anhelo. Desde luego, suenan a Venom, pero como ya he dicho antes, es como si se hubiesen puesto a grabar los temas después de ocho horas de levantar pesas. Se les nota rendidos y apagados, aunque no se pierde la sonrisa. Cada seis segundos, algún destello desquiciado y garajero levanta los ánimos.

"Burn this place (to the ground)", tema que retoma la velocidad speedica como referente, nos hace llegar a "Harmony Dies", composición creada a base de buen riffeo, cruda y con cierto poder, y con uno de los mejores solos de Jeff Mantas. Estos dos temas, realmente, me han molado. Puro Venom, por fin.

Una ambientación lúgubre y fantasmal, actúan como escenario para que Cronos, se explaye a gusto, antes de empezar propiamente el tema. "Possessed", el tema-título, nace amparado por unas guitarras realmente encendidas, que prenden fuego a todas las pistas del tema y regalan algo, muy en la línea de unos Celtic Frost densos, pero genial. La garganta de Cronos musicaliza todo, mientras el ambiente sucio de la composición va pudriéndolo todo a su paso. Velocidad, rabia y más maldad garajera, con algún que otro parón y locura graciosa, salvan el momento.

"Hellchild", "Moonshine" (con un aura muy "Angel Dust"), "Wing and a Prayer" (instrumental de gran capacidad y densidad), "Suffer not the Children", "Voyeur" y "Mistique", son los siguientes cabronazos sonoros que vuelven a mostrarnos a los Venom más rockanrolleros y machacones. La banda levanta sus alas, y nosotros, los metalheads, nos ponemos de rodillas. Venom siempre serán, tanto en un buen momento, como en el peor de todos ellos, Venom. Su señas de identidad, su naturaleza vaga, cachonda y rabiosa, será eterna. No cabe duda. Venom no son de seguir modas. Hacen lo que quieren y punto. Si te gusta bien, y si no, se follan a tu hermana. Actitud les sobra, y eso les hace grandes, a pesar de sus taras como músicos, que no son pocas ni jodidas.

Le llega ahora, el turno al fin de disco, pero almenos, ya que se despiden, y la formación, tal y como la conocíamos, se iba a ir a la mierda para siempre (bueno, para siempre es un decir, pues en 1997, ya volvían los tres cabrones a estampar su sello con "Cast in Stone"), nos regalan "Too Loud (for the crowd)", sin duda, un tema infaltable en cualquier recital de la banda. Nada que la banda no haya hecho ya, nada que nadie no haya superado a nivel técnico, pero un temazo con natural entrega y mucho despiporre metálico. Toda una declaración de principios de hasta donde estaba dispuesta a llegar la formación, y eso solo, aporreando sus intrumentos. Imaginad que Venom hubiesen sido maestros en onda Iron Maiden, Saxon o Judas Priest, ufff, entonces la cosa habría sido insuperable, pero bueno, para unir el mundo satánico con la calidad indiscutible y la vanguardia total y absoluta ya tenemos a los Celtic Frost. Venom son lo que son, y "Possessed" es un claro ejemplo de ello.

Los ames o los odies, ellos siempre te odiarán y te regalarán hermanos sucios, desvergonzados, nihilistas y primigenios de "The number of the Beast", "British Steel" o "Ace of Spades", una y otra vez, pero si los sabes valorar, esos discos serán tesoros sonoros, más gloriosos que mucho trabajo dorado.

3 cuernos altotes para un disco, que sin gustarme tanto como otros trabajos del combo, si tiene ese poso especial y diferenciador, que Venom acabaron perdiendo, y que aquí se intuía ya, algo tocado.

Cronos : Bajo y voz
Mantas : Guitarra
Abaddon : Batería

Sello
Neat