Swordmaster - Wraths of Time

Un poquito de Blackened Death Metal, y con goteo Thrash, para ir pasando el calor, macho. A sudar la gota gorda.

Swordmaster, suecos y belicosos, banda que, con el tiempo, iba a mutar a combete moñarrón-alternativo (acabarían siendo Deathstars, unos pseudo-Marylin Manson), empezaron con muy buen pie en el reino riffero y pegador. Típico caso de mendas que pierden el norte. Y los cojones.

Dosis elevadas de violencia, de mística, y todo filtrado, canalizado, a través de la idiosincracia de la naturaleza del Metal sueco. Dissectionistas de pro (contar con el hermano del legendario Jon Nödtveidt, Night, ayuda), cabalgadores y potentorrones.

A darle candela a la movida, hermanote. Nos toca ser decapitados por el maestro de la espada. Un EP rajador no espera a la vuelta de la esquina. "Wraths of Time" está aquí mismo, y ya no hay vuelta atrás.

Rodaremos, y sin cuerpo, colina abajo, hasta quedar aplastados como una puta sandia. Seremos como la enorme piedra que persigue al bueno de Indiana Jones en "En Busca del Arca Perdida". Pura velocidad, y cuesta abajo.

"Wraths of Time", el tema-prota, nace hurañote, arañador y destrozón. Black Metal satánico-ígneo, crudote-astral, a lo Immortal, acompañado por mucho riff Thrash, cortante y mega-denso, magia negra y unas voces desgarradas, rasposotas, curtidas por el alcohol barato, ideales para el invento que nos comemos ahora mismo. Rollete Dissection total (momento "Storm of the Light's Bane). Todo queda en casa, en familia. El negocio familiar no se traspasa. Aún. Nödtveidtismo del bueno, del que da el pego. Cervicales doloridas y un corazón que se nos oscurece en cuestión de minutos. Swordmaster venden bien su mercancía. Sal, pimienta y vinagre. Todo en cantidades industriales, para que se nos quede la lengua como la polla de un cimmerio.

"Upon Blood and Ashes...", de cadencia más lentorra, pero no menos molona, pronto se va poniendo las pilitas (y, de paso, también nos la pone a nosotros) y, ala, en nada, ya está al rojo vivo, dejando señal al rozarnos. Piel burbujeante. Un ascazo, vamos. Supuramos lo que no está en los escritos. No sabía yo que teníamos tanto líquido verde en el cuerpo (me huele a infección de las que hacen historia). Exprimimos bien la carne, expulsamos todo el "blandiblú", y, joder, después del lago de mierda, una ola plateada, metálica total, nos cae encima. Tsunami jodido, colega. La banda nos ha metido de todo en el body. Onda noruega, darkthronista-emperoriana, que no oculta su amor por el Thrash ochenteroso, por su colosal pegada, y con un final cojonudo. Acabas pidiendo más. Hemos escuchado unos doscientos temas idénticos, pero nos lo tragamos gustosos.

Ambiente new-age, tecladete astral, ventisca...peliculeo. Ya me imagino en lo alto de la colina, melena al viento, espada en mano, mirada perdida, a lo Arnie, y a puntito, como hará el tema, de saltarte de la yugular. Un comienzo majete, algo que nos relaja. Nada, falsa alarma. Nadie duerme en el reino de Swordmaster. Aquí se viene a perder cuatro kilos por track. "Conspiracy" es una criatura Thrash old school, testamentera-slayeriana-destructivista, por mucho que una intro bella y una onda doomie sirvan de teloneras. La banda está que se sale, irosa total. Tercera patada, y de impacto, en la cojonera. Ni que decir tiene que si quieres hijos, ala, a tirar de adopción.

Una outro, y de nombre "Outro" (no se esmeraron demasiado en bautizarla), que consiste, básicamente, en mostrar eructos de King Kong, chapan la aventura 95 de Swordmaster. Se acabó el viajecito por el mundillo disseccionero-blackista, chato. Tres tracks compactos y certeros, que nos dejan con hambre de más. Y eso, joder, es perfecto. Saturarte en un restaurante es un coñazo. Pedos, ardor estomacal, cagarrinas, el ojete dolorido. Putada. Eso sí, quedarte con hambre, no saturarte ni repitiendo platos, es lo más.

4 cuernos (bajos) para los pequeños Dissection. Metal adictivo.

Una pena que se amariconasen y dejasen la calidad aparcada. De dissectionistas a pelagatos marylinmanseros. Qué bochorno.

Ideal para fans de Dissection, del Black immortaliano y el buen golpe bay-arenista y germano-cabrón.