
1. Amanecer
2. La hija de las estrellas
3. Salta
4. El queso rodante
5. La ciudad del renacimiento
6. El lazarillo de Tormes
7. El bardo
8. Cuando nadie nos ve
9. La danza de los mundos
10 .Mi gente
11. Fiesta de la cerveza
12. Reina de mis sueños
13. 3,2,1... ¡La Tierra!
14. Música
15. Duermedela
Comenzar una reseña de Saurom diciendo algo así como qué "Saurom lo han vuelto a conseguir", o que "Saurom no tiene un disco malo", etc. quizá esté ya muy manido, y es que, efectivamente todas esas afirmaciones son ciertas, pero para que volverlo a señalar si es algo a lo que nos tienen acostumbrados los gaditanos. Joder, "Música", vaya título para un disco de música, puede que hasta pretencioso, pero claro cuando detrás de tan bella portada nos encontramos, de nuevo, con todo un portento musical, esa aparente pretenciosidad se convierte en un homenaje a, precisamente, la música.
Saurom siguen construyendo un puente infinito desde sus más heavies trabajos, como "Maryam" u "Once Romances..." hasta este "Música", pues no nos podemos llevar a engaño, esta recién estrenada obra no es más que la continuación lógica de "Vida" y "Sueños", en los que sin abandonar sonidos rockeros atemperan su música con melodías que, entrelazadas con los elementos folclóricos de los que Narci Lara siempre ha dotado a la banda, suponen un paso más, un paso firme de la que ya es, por méritos propios, banda referencia para muchos hispanoparlantes amantes de la música.
Y es que romper el cascarón con un tema como "Amanecer" es una auténtica delicia, con un estribillo que se te queda en la cabeza desde la primera escucha, un homenaje a la madre tierra tan necesario hoy en día. La parte instrumental, coronada por un buen solo de guitarra que le da al tema la justa dosis rockera, encandila a unos (más folk) y a otros (más rock), siendo un ejercicio absolutamente fascinante.
"La hija de las estrellas", una historia de amor entre una estrella y un humano que al ser descubierta fue obligada a dejar el cielo, leyenda panameña que en la voz de Miguel Ángel Franco es tan entrañable como lo es la labor de Narci con sus instrumentos de viento. "Salta" junto con "Fiesta de la cerveza", son los temas más fiesteros del disco, y sin embargo, sin dejar de lado la calidad que atesora la banda son las que menos me han llamado la atención, y ¡ojo!, para nada son malos temas, pero al lado del resto se quedan un poco cojos, y es que "Salta" es eso, una pura fiesta que a buen seguro en los directos incidirá y acrecentará esa simbiosis perfecta que existe entre público y artista en cada uno de sus conciertos, pero que dado el excelso nivel del disco me gusta un poco menos.
"El queso rodante", a ritmo de ukelele te transporta directamente a Gloucester, Inglaterra, donde al parecer existe la tradición de, cada último lunes de mayo celebrar una carrera donde los participantes deben atrapar, colina abajo, un queso típico de la región; tema también muy festivalero , pero que a diferencia del anterior, si me transmite muchas más sensaciones. Y sigue, "La ciudad del renacimiento", una especie de introducción para uno de los temas estrella del disco. Si, el puto lazarillo de Tormes hecho canción. Aquellos que hicimos la EGB y que ya peinamos alguna cana tuvimos la obligación de leer la novela, precursora de la picaresca y que Saurom han musicalizado de forma sublime. Temazo que, sin ellos pretenderlo, o sí, me hacen rescatar tan menuda novela anónima para, esta vez sin exigencias estudiantiles, buscar tantos matices como, seguro tiene, y todo ello al ritmo de uno de los temas más rockeros del disco.
Otro puente, "El bardo", nos sirve para conectar con la balada del disco, “Cuando nadie nos ve”... qué bonita pieza; a mí me dejaron absolutamente colgado con aquella "El Príncipe" de su álbum "Vida", pero no miento si digo que las mismas sensaciones me transmite "Cuando nadie nos ve"; y es que, si bien instrumentalmente es maravillosa, no le va a la zaga Miguel Ángel Franco, que no es que la cante, no, es que la hace suya, la interpreta dándole mil matices vocales que consiguen embriagarte. Brutal.
Llega "La danza de los mundos", tema "buenista", al igual que "La danza de los mundos", donde la banda transmite todos esos buenos sentimientos, algo de lo que, por otro lado, siempre han hecho gala. El primero, cantado en varios idiomas; español, catalán, gallego y euskera aboga por la unidad de los pueblos, desde Cádiz al resto del estado español, y por qué no, al resto del mundo. Con la colaboración en las voces de Auri Bravo, Ingrid Padoan (Outgravity) y Rosa de la Cruz (Ankor), consiguen construir otro himno por y para la libertad y el respeto entre diferentes culturas. Y eso, trasladado al mundo, a los hermanos del otro lado del charco, es lo que supone "Mi gente", con un rollo muy guapo, en la que se atreven con alguna trompeta que te lleva hasta el baile de forma irremediable; imagino este tema en un directo para danzar como si no hubiese mañana. Que grandes son Saurom, ostias!. Sigue "Fiesta de la cerveza"• con la colaboración de Lèpoka, mis vecinos castellonenses; a ver, el tema está guapo, pero me parece, como decía antes, el más simplón del disco.
"Reina de mis sueños" cuenta el final de la historia iniciada con "Hija de las estrellas", y para ello cuenta con la bonita voz de Xana Lavey, maravillosa cantante de Celtian y que embasta su voz con la de Miguel Ángel, consiguiendo contarnos el desenlace de la historia de amor entre el humano y la estrella. "1, 2, 3, ¡La Tierra!", con los efectistas teclados de Santi Carrasco, cuanta la venida al mundo de un bebé, donde una vez más la voz de Miguel Ángel te arropa de forma emocionante.
Y llega "Música", seis putos minutos de MÚSICA, allí donde aúna Saurom todas sus virtudes, que son muchas, las partes folkies, con una base firme pero calmada, letra homenaje a la propia música, todos los intérpretes rayando a una altura descomunal, acelerando en el último tramo para darnos un poco de heavy metal del que nunca se han olvidado... esto es Saurom.
"Duermedela" cierra el disco, acústicas y violines para poner un broche exquisito para un disco bonito, entrañable, definitorio de lo que es hoy en día Saurom sin olvidar lo que fueron, convirtiéndolos en una de las mejores bandas de rock cantado en español. Un disco para asimilar, para darle varias escuchas, para dejar que te atrape.
Miguel A. Franco: Voz
Narci Lara: Guitarra, flautas, whistle y gaita
Raúl Rueda: Guitarra
Jose A. Gallardo: Bajo
Santi Carrasco: Teclados
Antonio Ruiz: Batería