
1. "Standing On the Border" - 3:37
2. "It's Alright" - 3:36
3. "Keep your Love" - 4:34
4. "Can't Keep you Satisfied" - 5:15
5. "Jersey Lightning/
It's Evil!" - 5:36
6. "Ain't no Magic" - 5:08
7. "Crying Smiling" - 3:46
8. "Take the Water" - 5:22
9. "Broken Glass" - 2:26
Nuevo hallazgo abriendo y escudriñando en las tripas del universo del rock en los '70, esta vez concerniente al proyecto en solitario de otro de esos genios semidesconocidos que siempre merece la pena recordar.
Si John Cann se desmarcó de Atomic Rooster y Ritchie Blackmore hizo lo propio con Deep Purple (cuyos resultados serían Hard Stuff y RAINBOW respectivamente), un Stanley Frederick Webb de tan sólo 29 años crearía de la nada a Broken Glass.
Aunque el hombre ya venía de una carrera bastante provechosa y ajetreada, por supuesto. El nativo de Fulham se unió al bajista Andy Silvester y de esta fructífera colaboración nació Chicken Shack, grupo esencial en la Historia del blues rock británico de finales de los '60, que gozó tanto del aplauso de la crítica especializada como del público, sin embargo un tanto dañada por los múltiples cambios de "line-up" (destaca la salida de la cantante y teclista Christine Perfect en sus primeros años de existencia debido a su matrimonio con John G. McVie, bajista de Fleetwood Mac, en cuyas filas militaría...qué pequeño es el Mundo, ¿no?).
Después llega el exitoso "OK, KEN?" y Shack continúan llenando su discografía hasta que en 1974 Webb, que ha sido el único miembro constante, abandona el barco para tomarse un descanso; y lo hará junto a Savoy Brown (otro de los gigantes del british blues de la época), donde irónicamente se encuentran dos de sus antiguos compañeros, Silvester y el batería Dave Bidwell. Con ellos graba un solo álbum, "BOOGIE BROTHERS", lanzado ese mismo año y sin generar demasiada atención en las listas, no obstante un plástico fresco y atractivo donde lo que más sobresale es la dupla instrumental Stan Webb/Miller Anderson.
Éste, guitarrista que ha dejado su buen hacer en The Dukes, la Keef Hartley Band o sus colaboraciones con Ian Hunter, será parte de Shack en el futuro, pero antes de eso va a protagonizar un trabajo único, resultado de una banda única, proyecto independiente de un Webb en plena autonomía e inspiración, que lidera un cuarteto muy solvente donde se unen los talentos del bajista Rob Rawlison (también de Ian Hunter Band), el batería Mac Poole (de Warhorse) y el guitarrista y cofundador Robert Blunt (Silverhead), además del mencionado Anderson. EMI apoya dicho proyecto, que será grabado en poco más de tres semanas y se publicará por mediación de Capitol al término de 1975.
En mitad de la década y con infinidad de estilos confluyendo en el mundo del rock, la propuesta de Broken Glass no cuesta ser interpretada; empiezan con la genial "Standing On the Border", rítmica y disfrutable, y es suficiente para hacernos una idea. Blues en su más pura forma, que entra a la primera escucha, repleto de "riffs" y mucho piano, donde Webb y compañía aglutinan lo mejor de Shack y Brown con las no poco visibles influencias del hard sureño de Skynyrd y ZZ Top y un rock añejo y de fácil asimilación con los dejes de FREE o FACES (debido al gran parecido que se le puede sacar a la voz del líder, rasgada y descarada, con la de Rod Stewart).
Esta pieza de apertura puede ser el mejor ejemplo, pero también "Crying Smiling", que captura al oyente con sus melodías y estribillos adictivos, y una "Take the Water" que se vuelca sobre los desarrollos instrumentales partiendo de las armonías de esas "slide guitars" de Blunt y Webb, quien no precisa de ser un guitarrista excesivamente virtuoso, simplemente domina a la perfección la improvisación, los armónicos y "riffs" pegadizos y potentes y es poseedor de buen gusto, equiparable a un Rory Gallagher, un Billy Gibbons, un Gary Rossington o un Ron Wood cualquiera. Y ello basta para encandilar a todo amante del rock que se precie.
Y si lo mejor del rock americano y el blues inglés convive en estos temas, la intensa "Can't Keep you Satisfied" también toma buena nota a través de unos punteos que rezuman pureza sureña y elegancia británica en todos sus acordes, aunque su atmósfera sensual y humeante nos transporta inevitablemente al rincón más oscuro y grasiento de cualquier bar de Jacksonville. Por el contrario, "Jersey Lightning" se acoge a lo primero, pues exhala esencia country por todos sus poros, de la escuela de Creedence Clearwater Revival, instantánea y primitiva; este corte viene a ser algo así como la introducción de "It's Evil!", orgía de cruentos "riffs" con las "slide guitars" y el dinámico bajo de protagonistas y Webb compartiendo voces con Anderson.
Por supuesto también es un buen indicativo de la frescura que cruza todo el plástico, pues si algo lo distingue, a pesar de que sus patrones estén cortados por el rock y el blues, es su propuesta musical, atractiva, original y versátil; lo vienen a corroborar las canciones restantes. A la cabeza "Keep your Love", con los muchachos empapados del espíritu del soul, incluso el reggae, no destacando la técnica guitarrística del primero, sino los arabescos "slide" que hace Blunt y el bajo, más resultón que nunca; Tony Ashton, productor del álbum y antiguo colaborador de Eric Clapton, Jon Lord y Paul McCartney, se encarga de los teclados.
Sus relajantes melodías y coros se dan de golpes con la densidad y pesadez de las esferas a las que nos arrastra "Ain't no Magic", donde los Glass se influencian ahora de ese funk que tanto estaba trastocando la música de muchas bandas británicas en el momento; se vuelven a escuchar las penetrantes notas del bajo de Rawlison junto a una sección repetitiva, mientras retazos de psicodelia terminan de dar forma a esta extraña pieza. Por el contrario, la suavidad del folk escoces en la línea de Stealers Wheel (y es que Webb recuerda mucho a Gerry Rafferty aquí) domina la amable "It's Alright".
Los acordes de la balada que da título al plástico son perfectos como colofón, así como sus letras, que sugieren un adiós, aunque no definitivo ("The people are going, the songs are sung...but the music has just begun"); Anderson usa un timbre aterciopelado, casi susurrante, y la melancolía parece inundarlo todo, una melancolía evocadora y atemporal con el indudable sabor americano de J.J. Cale o Rick Danko.
Por desgracia sí que se trató de un adiós definitivo pues la limitida promoción que dieron Capitol al álbum le impidió despegar como era debido para alcanzar un éxito moderadamente notable, pese a una buena recepción de críticas. Así que Broken Glass no tuvo oportunidad de ser más que eso, un proyecto único e irrepetible, y poco a poco una jugosa curiosidad, para convertirse con el paso del tiempo en una reliquia entre todos los sensacionales trabajos que fueron producidos aquel lejano y fructífero 1975.
Por su parte, Webb haría resurgir a Shack de sus cenizas poco después con un renovado "line-up", donde incluiría a Blunt y a otros de sus compañeros con el transcurso de los años...
Canción favorita: "Can't Keep you Satisfied"
Stan Webb: Voz/guitarra
Robert Blunt: Guitarra
Miller Anderson: Guitarra/voz
Rob Rawlison: Bajo
Mac Poole: Batería
Anthony Ashton: Teclados