Arsis - Unwelcome

Enviado por Betrayer el Sáb, 07/09/2013 - 22:38
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Arsis son el vivo ejemplo de que en esto del metal, ofrecer un producto de calidad, no siempre es sinónimo de éxito. Desde el inicio de su carrera los americanos han apostado por una mezcolanza muy atractiva, que combina la velocidad vertiginosa y los infinitos cambios de ritmo del Technical Metal, con puntuales interludios melódicos más propios del Death Melódico fabricado en tierras suecas. A priori la propuesta suena la mar de atractiva ¿no? Pues, misterios del metal, Arsis, después de cinco excelentes álbumes editados desde su debut en 2004 con el magno “A Celebration of Guilt”, aun siguen sin haber recibido el reconocimiento merecido.

Pero su buen hacer no pasó desapercibido para uno de los “jefes” de la escena “death-melódica” actual, de ahí que el gran Michael Amott decidiera fichar al ex - guitarrista de Arsis Nick Cordle, después de la salida de Arch Enemy de su hermano Christopher. Poco le importó por eso el hurto al gran James Malone, pues como buen discípulo que es del maestro Schuldiner, él es también el amo y señor de su banda, y ya está acostumbrado a cambiar los miembros de su formación con relativa asiduidad. Y la verdad que parece que Malone tenga un ojo clínico para el tema de los fichajes, pues siempre consigue rodearse de jóvenes talentos que ayudan a que Arsis sigan sonando tan frescos como el primer día.

Para este “Unwelcome” Arsis siguen con los mismos patrones que en lanzamientos anteriores, temas directos y agresivos, cuya duración oscila entre los tres y los cuatro minutos, consiguiendo no saturar así al oyente con su vorágine sonora, pues es increíble ver la cantidad de riffs, punteos y solos que estos señores pueden incluir en un solo corte. Y esto puede parecer un detalle sin importancia para muchos, pero un servidor lo encuentra un gran acierto, ya que son muchas las bandas que ofuscadas en las velocidades imposibles, el virtuosismos extremo y las sobreproducciones, acaban ofreciendo trabajos tan recargados que cuestan horrores de digerir. Arsis al igual que el mencionado Schuldiner y sus Death, siempre han sabido mantener ese difícil equilibrio entre lo técnico y lo melódico, y pocas bandas pueden presumir de haber sido capaces de encontrar ese punto medio.
Aun así, cabe destacar que en la escucha de este “Unwelcome”, flota en el aire una cierta sensación de regreso a sus orígenes digamos más agresivos de su primer disco “A Celebration of Guilt”. Y no es que Arsis haya aflojado pistonada en ningún momento, pero sí que es verdad que en su anterior “Starve for the Devil” hubo una ligera suavización de su sonido, la producción bajó un peldaño de intensidad, y los temas apostaban un poquito más que de costumbre por la melodía (eso no quita que el disco fuese tremendo).

Ya desde la inicial “Unwelcome” con esa precisa entrada entre batería y guitarras, uno ve que la cosa va en serio. Aquí se va a repartir cera a diestro y siniestro, pero como te decía, el ostión siempre va a venir acompañado con un poquito de crema antiinflamatoria para suavizar el dolor. Ese tira y afloja es y será siempre la mejor baza de Arsis, eso y los espectaculares solos que nos irán lloviendo tema a tema, normalmente breves pero tan acertados y bien encajados que hacen que la mayoría de competidores tengan que arrodillarse ante ellos. Y parecerá una chorrada, pero un gran solo puede medio arreglar un mal tema, pero un mal solo puede arruinar un gran tema, y en eso Arsis son unos maestros, los temas son enormes y los solos aún más si cabe.

Otro punto fuerte de este disco es sin duda la espectacular labor del batería Shawn Priest, que nos hace olvidar de un plumazo a Michael van Dyne, me atrevería incluso a decir que este es el mejor trabajo de batería hecho en un disco de Arsis. El dinamismo con el que Priest sabe conjugar rapidísimos blast beast, martilleantes dobles bombos e increíbles juegos de platos es espectacular, dándole a la amalgama de “desperdigados” riffs una cohesión total.

El resultado final, pues un disco de cinco estrellas, un espectáculo sonoro donde los amantes de la técnica impoluta quedarán la mar de satisfechos, y a su vez, los que se decantan por un Death Metal algo más melódico también encontrarán sus momentos. Es espectacular ver como un corte como “Handbook for the Recently Deceased” nos machaca vivos con su violencia y a partir del minuto uno aparece una cabalgada digna de los mismísimos Annihilator, para posteriormente seducirnos con un absorbente solo melódico que firmarían los mismísimos Arch Enemy con los ojos cerrados. Y como este hay varios ejemplos más a lo largo del disco, aunque si tuviese que elegir un solo corte os recomiendo de todas todas el trallazo "Carve My Cross", una maravilla de tema con un solo que quita el hipo.

Aunque sin duda el cúmulo de los despropósitos llega con el tema “Sunglasses at Night”, una versión del hit del cantante canadiense Corey Hart, y que acaba convirtiéndose en un tema acojonante. Después de los primeros compases melódicos con los que arranca el tema, nos llueve una vorágine sonora que asusta, para después ir intercalando el pertinente estribillo que será donde el tema se tome el merecido descanso, y qué decir del solo, lo explicado anteriormente, sublime. Y es que a veces la frontera entre los miles de géneros musicales es mucho más fina de lo que nos parece.
Arsis lo ha vuelto a conseguir por quinta vez consecutivas, otro trabajo de un nivel espectacular, que desborda fuerza, garra, técnica y melodía por todos sus poros. Sin rellenos, sin bajones, sin manchas, sin aditivos, sin peros. Vamos un “sin” pero con todo. Además la edición digipack incluye una versión remasterizada de su tema más laureado “The Face of My Innocence” y los temas de su EP del 2012 “Leper’s Caress”.

James Malone: Guitarra, voz.
Noah Martin: Bajo.
Shawn Priest: Batería.
Brandon Ellis: Guitarra.

Sello
Nuclear Blast